El gran Martin Scorsese ya demostró con El cabo del miedo, su pericia en el mundo del thriller, ahora lo intenta de nuevo pero añadiéndole un elemento nuevo, el misterio. Y aquí es donde precisamente, al menos a mi juicio, ha "fallado" el maestro. Esta claro que en todo relato de suspense, hay que ir dándole una serie de pistas al espectador para que pueda resolver el caso, antes de la gran sorpresa final. Pero lo que no se debe hacer nunca, es dar unos indicios tan claros, que a los diez minutos de proyección ya sepas lo que esta pasando.
Pues bien, eso es justo lo que sucede con esta película, todo esta muy bien en ella, desde ese aire retro, de cinta de misterio de los años 50 tipo Hitchckock, una música desasosegante que también recuerda a las de aquella época y sobre todo unas geniales interpretaciones, especialmente la de un Leonardo Di Caprio que se va creciendo como actor en cada uno de sus recientes trabajos.
El "problema" es pues un guión, que incluso siendo algo farragoso y difícil de seguir por momentos, no conseguí ocultar el supuesto gran final sorpresa, nisiquiera en los primeros compases del film, lo que hace que el ritmo decaiga en su parte central, dado que al imaginar como va a acabar la cosa, los descubrimientos que va haciendo el protagonista, no resultan tan emocionantes como debieran.
Claro esta, que cualquier película firmada por Scorsese vale la pena, cualquier plano de este film, es una lección de como ha de colocarse la cámara, pero no pasará a la historia como uno de los mejores trabajos de este genio.
Lo siento amigo, pero por una vez disiento totalmente de tu opinión. Shutter Island me ha parecido una soberbia película, en la tradición del mejor Hitchcock. A mí (afortunadamente), el desenlace me pilló completamente por sorpresa, aún estando avisado, y el efecto que pretendía el director me impactó como un mazazo. Todavía resuena en mis oídos la gloriosa frase final, que pone un broche valiente a una estupenda película.
ResponderEliminarCoincido contigo en la valoración de la parte técnica: una soberbia (y gótica) fotografía, casi en blanco y negro, que le va como un guante a trama, y una música que enfatiza (algunas veces demasiado creo) el desasosiego del espectador. Respecto a Leo he de decir que, sin ser santo de mi devoción, está que se sale. Creo que se ha quitado definitivamente la pelusilla de adolescente (si, ya se que para muchos lo hizo hace tiempo) y borda un papel realmente complejo y atormentado.
Sólo destacaría en la parte negativa (por poner algo), un cierto "empacho" de escenas oníricas, lo que hace caer la peli en una ligera reiteración narrativa, ralentizando la trama en la parte central del film.
Resumiendo: un peliculón que no hay que perderse. Si lo veis, sed buenos y no contéis el final...en el mundo aún quedamos almas cándidas ;-) ¿Cómo que Bruce Willis está muerto?
Que ganas de ver esta pelicula, de verdad una de las que mas espero de este año, pero...aqui tenemos que esperar hasta el 11 de Marzo.
ResponderEliminarSaludos.
Entonces la culpa a de ser mía, que veo demasiadas películas, pero lo cierto es que a los 10 o 20 minutos ya sabía el final. Por lo que no me sorprendió en absoluto.
ResponderEliminares lo malo de ver tanto cine :(