DJANGO DESENCADENADO

 

 

  Siempre y cuando te gusten los Spaguetti-Westerns y las películas de Tarantino... ¡¡¡PELICULON IMPRESCINDIBLE!!!

  Y es que una vez más Quentin Tarantino nos regala toda una declaración de amor a un genero cinematográfico de los llamados "menores". En este caso se trata de aquellos westerns de bajo presupuesto rodados en nuestra Almeria con capital italiano, alemán y español, cuyo máximo exponente fueron las películas dirigidas por Sergio Leone y protagonizadas por un joven y practicamente desconocido Clint Eastwood. Pero Tarantino no limita su homenaje a la obra de Leone (a la que además de la famosa trilogía del dolar hay que añadir Agáchate Maldito! y la épica Hasta que llego su hora) sino también a otros spaguetis más humildes como la propia DJango original o la divertida Le llamaban Trinidad.

  Todos los elementos tecnicos y narrativos del western europeo de los 60 y 70 aparecen en este film, los primerisimos planos antes de los duelos, la violencia cruda y sucia, el cinismo de los personajes principales, los flasbacks que atormentan al protagonista, la captura y tortura del mismo antes de la masacre final, etc, etc. Pero añadiéndoles ese toque particular tarantiano que tanto nos gusta, sobre todo esos magníficos diálogos y momentos humoristicos (atención a la genial y divertida discusión por los agujeros de los sacos del Ku Kux Klan) a los que nos tiene acostumbrados y que aquí casan perfectamente con la historia.

  Tal vez se la pueda acusar de tener un metraje excesivo (unas 2.40 horas), y puede que algunas situaciones estén alargadas o sean "innecesarias" , pero sinceramente he de reconocer, que a mi mi no me ha sobrado ni un solo segundo de metraje. Y es que aparte del argumento, que relata la liberación y colaboración de un esclavo y un cazador de recompensas para liberar a la mujer del primero, ¡cada plano del film es una delicia para cualquier amante del cine que se precie! le faltan a uno ojos para disfrutar de todos los elementos que aparecen en pantalla en cada fotograma, vestuario, escenarios exteriores o interiores, fotografía...

  Mención aparte merece el trabajo del magnifico plantel de actores que desfilan por la cinta. El protagonista Jamie Foxx esta muy bien en un personaje que podríamos definir como la versión "negra" del hombre sin nombre interpretado por Eastwood en la mítica trilogía del dolar, pero precisamente por el laconismo de este tipo de papel, es inevitable que no quede un poco eclipsado por los auténticos reyes de la función los ¡INMENSOS! Christophe Waltz y Leonardo Di Caprio. El primero que ya nos sorprendió a todos con su magnifico oficial Nazi de Malditos Bastardos, confirma aquí un talento y un carisma innatos, regalándonos otra esplendida interpretación. Pero es que Leonardo Di Caprio esta ¡IMPRESIONANTE! en su rol de terrateniente negrero sureño, sus gestos, sus ademanes, su amaneramiento, sus caras... ¡a ver cuando se le reconoce de una vez el gran talento que posee con globos de oro, oscars o cualquier otro premio a la interpretación!

  Rodeando a este trio de ases, tenemos rostros habituales del cine de Tarantino y como es costumbre, el bueno de Quentin aprovecha para "reivindicar" alguna vieja gloria "de segunda" olvidada actualmente. Esta vez le ha "regalado" al televisivo Don Johnson un breve pero divertido personaje, para demostrar que podía haber gozado de una mejor suerte en la pantalla grande.

  Otro de los puntos fuertes del cine de Tarantino, la música, no defrauda tampoco en este film, en el que podemos toparnos desde temas "clásicos" del spaguettii-western, el propio tema principal del DJango original, el magnifico tema central que compuso el maestro Ennio Morricone para el film Dos mulas y una mujer o la canción que acompañaba los créditos iniciales de Le llamaban Trinidad, hasta ¡musica Rap que no solo no desentona sino que acompaña a la perfección las imagenes.

  En definitiva, un nuevo Tarantino, en mi opinión a la altura de Malditos Bastardos, que hará las delicias de sus seguidores y causará una vez más el horror en los que detestan su estilo.