
Estamos pues ante una película de serie b, entretenida (aunque sin pasarse), con FX mediocres, más propios de un videojuego que de una producción cinematográfica, y escenas de combates con espadas, eso si muy bien coreografiados, rodados y montados, no en vano las escenas de acción son la especialidad de su director, Dominic Sena, un realizador que hace unos años prometía llegar bastante más lejos de lo que lo ha hecho.
En lo que al reparto se refiere, nos topamos por ene sima vez con Nicolas Cage (¡pero cuantas películas hace este hombre al año!), que repite su personaje de siempre, un tipo duro melancólico y torturado, un papel claramente alimenticio que se limita a interpretar con profesionalidad y punto. Le acompaña Ron Perlman, otro tipo habitual en este tipo de cintas, que también hace lo de siempre.
Para concluir, un film entretenido sin demasiadas pretensiones, que se olvida tan pronto como se abandona la sala.
No hay comentarios:
Publicar un comentario